Las pequeñas y medianas empresas, Pymes, tienen una particular importancia para las economías nacionales, no solo por sus aportaciones a la producción y distribución de bienes y servicios, si no también por la flexibilidad de adaptarse a los cambios tecnológicos y gran potencial de generación de empleos.
¿Te imaginas cómo sería nuestra vida sin estos negocios?
Sería imposible hablar de economía mexicana sin ellas ya que estas representan un excelente medio para impulsar el desarrollo económico y una mejor distribución de la riqueza.
Hoy en día, los gobiernos de países en desarrollo reconocen la importancia de las Pymes por su contribución al crecimiento económico, a la generación de empleo, así como al desarrollo regional y local.
En México las PyMEs constituyen el 97% del total de las empresas, generadoras de empleo del 79% de la población y generan ingresos equivalentes al 23% del Producto Interno Bruto (PIB), lo cual es una clara señal de que debemos poner atención a este tipo de empresas y verlas como lo que en realidad representan: La base de la economía mexicana.
Sin embargo y a pesar de ser una fuente muy importante en la economía del país, las PyMEs no cuentan con muchos recursos necesarios para desarrollarse de manera plena y eficiente, así como también se ven afectados por otros motivos como:
Falta de innovación tecnológica: Sus inversiones para tecnología, infraestructura, seguridad, entre otras, son de un 0.5% y 0.7%, respectivamente, estancando su propio crecimiento. Es por esta razón que parece lógico que el 70% de las PyMEs no cuenten con una base tecnológica bien aplicada. Esto puede deberse al temor de no poder solventar gastos de inversión y operación o a la falta de conocimiento de sistemas o incluso por razones menos aceptables como la resistencia al cambio.
Falta de créditos: A pesar de todo lo que las pequeñas y medianas empresas aportan al país, este segmento ha sido de los más olvidados por el Gobierno y los bancos tradicionales. Sólo la falta de acceso a crédito para el crecimiento es el principal freno para el 30% de las Pymes mexicanas. Esto es preocupante pues retrata una problemática real por la cual las empresas mexicanas no logran crecer al mismo ritmo que lo hace su competencia en otros países.
El negocio informal: El negocio informal juega un papel muy importante ya que en los últimos años ha tenido una gran proliferación y no genera ingresos fiscales, se sustenta en el contrabando y prácticas ilegales como la producción y la venta de “productos piratas” que solo generan competencia desleal contra las empresas legalmente establecidas, además que la corrupción dentro del sector público no resulta benéfica para este suceso, considerando un reto más para las PyMEs, dentro de los desafíos a los que se tienen que enfrentar.
Otros datos, que impactan a la situación actual de las Pymes son: de cada 100 empresas que se crean, 90 no llegan a los 2 años (Grabinsky, 1992), siendo el índice de mortalidad muy alto.
¿Cómo explicar entonces el hecho de que la economía mexicana está casi (99% sector manufacturero) totalmente formado por Pymes?
Esto se explica por la existencia también de una alta tasa de rotación de estas empresas: así como desaparecen casi todas las empresas que se crean y mueren en menos de 2 años, se crean una gran cantidad de empresas nuevas. En México, según Ruiz Durán (2002), los datos censales de 1998 comparados con los del 1993 dan un crecimiento de 123, 617 nuevas empresas por año. Este proceso estuvo dominado por empresas pequeñas, el incremento explica el 97.54% de estas empresas. El problema de esta expansión empresarial ha sido que la mayor parte de estos negocios se trata de iniciativas de autoempleo, de sobrevivencia precaria.
¿Qué necesitan entonces las PyMEs en México?
Las PyMEs requieren ahora, programas y redes de apoyo para capacitación empresarial y un mayor acceso a facilidades de financiamiento. Es indispensable la innovación y la creatividad para poder enfrentarse de forma estratégica a los retos que representa la recesión.
En un contexto como el que atravesamos ahora, a mitad de una pandemia global por COVID-19, México necesita fortalecerse económicamente y buscar los modos de reinventarse a través de estrategias como la realización de estrategias de mercado, la creación de un plan financiero, buscar asesoría legal, así como también generar estrategias de marketing y presencia online.
0 Comentarios